El día de su presentación, la alianza opositora exhibió pugnas por conservar las posiciones políticas de los grupos antagónicos que la conforman.César Nava reviró a Manuel Camacho Solís por la candidatura a la presidencia municipal. Camacho corrigió en público a Nava. El panista quiere —en estricto cumplimiento al convenio— que la alcaldía sea para un militante de Acción Nacional. Por el contrario, Camacho Solís impulsa a Enrique Doger Guerrero.
Otra inconformidad visible fue la exigencia para que el candidato de “Compromiso por Puebla”, Rafael Moreno Valle, cogobierne con las fuerzas izquierdistas. “Queremos que aquí haya un gobierno de coalición”, patentizó Camacho Solís.
En la víspera del acto aliancista, militantes panistas exigieron a la dirigencia estatal respeto a sus posiciones. Enrique Rojas, Luis Olmos, Alfonso Bello, Jesús Saldívar y Miguel Ángel Ayllón pidieron “cerrarle el paso” a los priistas en las candidaturas a diputaciones.
A pesar del llamado de César Nava a realizar un “cambio pacífico”, los aliancistas reprimieron a golpes una protesta de perredistas inconformes con la alianza y culparon al gobierno estatal de querer sabotearlos.
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