martes, 24 de enero de 2012

Melquiades y Marín malbarataron la reserva Atlixcáyotl-Quetzalcóatl

Melquiades Morales Flores y Mario Marín Torres vendieron en sólo 373 pesos el metro cuadrado en casi toda la reserva territorial Atlixcáyotl-Quetzalcóatl, donde ahora el precio comercial llega a ser hasta de cuatro mil, es decir, 10 veces más del importe promedio que la administración estatal impuso en sus transacciones.

De acuerdo con la respuesta del Fideicomiso de la Reserva Territorial Atlixcáyotl (Frtaq) a la solicitud de transparencia 00407311, entre 1999 y 2010, los entonces mandatarios de Puebla vendieron 339 predios -los cuales sumaron una extensión de casi un millón 300 mil metros cuadrados- en sólo 484.7 millones de pesos, cantidad que representa menos del uno por ciento del presupuesto anual del gobierno del estado en este año.

Según la documentación oficial, Morales Flores comercializó en 409.2 millones de pesos un total de 240 inmuebles, los cuales representaron una superficie de casi millón 190 mil metros cuadrados; es decir, ofertó en 344.15 pesos cada metro cuadrado.

En contraste, Marín Torres tomó la decisión de hacer transacciones en un precio que duplicó el promedio establecido por su antecesor en el cargo, sobre todo porque prácticamente ya estaba todo vendido.

De esta manera, colocó en 75.5 millones de pesos 99 terrenos, los cuales sólo llegaron a contar 108 mil 713.77 metros cuadrados; por tanto, a finales de la gestión estatal anterior, el Frtaq, encabezado entonces por Rafael Moreno Valle Buitrón, trató de vender predios previstos para reserva ecológica, áreas verdes y de equipamiento, a cambio de donar otros inmuebles del gobierno local al sur de la ciudad; sin embargo, no pudo conseguir la autorización de la Secretaría de Desarrollo Social a nivel federal.

Sólo quedan 29 predios disponibles

A la fecha sólo quedan 29 predios disponibles, reveló el organismo encabezado por Pedro Plaza Montaño, por lo que el reportero preguntó: “¿Cuántos no serán vendidos y por qué?” El funcionario respondió, en forma ambigua: “todos los predios que su destino permita su venta, serán enajenados”.

La información requerida se encuentra clasificada como reservada, mediante acuerdo emitido el 2 de febrero de 2011 por el director general del Fideicomiso Público de la Reserva Territorial Atlixcáyotl-Quetzalcóatl conforme a lo establecido en los artículos 11 y 12 fracciones II, IV y X de la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública del Estado. Así, una vez concluida la condición de reserva ésta se pondrá a disposición como información pública.

Es imposible, por el momento, saber qué personas, empresas, escuelas, gobiernos o instituciones compraron los predios; es más, tampoco es posible saber por qué se vendieron o cuál fue la razón para hacer las transacciones con estas personas.

Y es que el Fideicomiso Público de la Reserva Territorial Atlixcáyotl-Quetzalcóatl tomó la decisión de clasificar como reservada tal información, conforme a lo establecido en los artículos 11 y 12 fracciones II, IV y X de la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública del Estado.

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