YADIRA LLAVEN
Debido a los altos contaminantes de químicos y colorantes que son depositados en el río Ametlapanapa, por las fabricas conocidas como Las Moras, Tapetes Textil Contemporáneo y la marca de agua Bonafont, el regidor de Obra Pública y Ecología municipal de Juan Crisóstomo Bonilla, José Andrés Tepale Hernández, hizo un llamado urgente a la Secretaría de Sustentabilidad Ambiental y Ordenamiento Territorial (SSAOT) para que inspeccione la zona y de ser necesario sancione a las firmas contaminantes.
En entrevista, José Andrés Tepale puntualizó que a su llegada a la administración se extendió un oficio a dichas firmas para que construyeran zanjas donde se deposite los químicos y colorantes que utilizan a diario, pero no han hecho caso a la solicitud municipal.
El río contaminado está ubicado a un kilómetro y medio de la cabecera municipal de Juan Crisóstomo Bonilla, lo que ha empezado a generar molestia entre los poblados cercanos.
El funcionario aseguró que en este problema también se ha pedido la intervención de la Comisión Nacional del Agua en estado (CNA), para que dejen de tirar las descargas de químicos al Ametlapanapa, pero tampoco ha obtenido una respuesta desde mayo a la fecha.
El regidor de Obra Pública y Medio Ambiente lamentó que son alrededor de 15 mil habitantes los que se verían afectados por la concentración del cloro y diferentes tinturas que utilizan las fábricas mencionadas.
Reveló que la tira de los contaminantes son a todas horas, sin importar que al mediodía es cuando se esparcen los penetrantes olores por gran parte del poblado.
Dijo que aunque no han tenido un reporte oficial de alguna familia infectada por los químicos, comentó que varias familias Juan C. Bonilla comenzaron a presentar problemas de salud, como infecciones en la piel, gastrointestinales y en vías respiratorias.
Tepale Hernández comentó que también la principal barranca de esa región, conocida como Pajoaca, es contaminada todos los días con aguas residuales que producen tres industrias instaladas sobre la carretera Huejotzingo, entre ellas Quirmex.
El funcionario comentó que la barranca tiene un cauce de más de cuatro kilómetros, de la que incluso los agricultores de la zona extraen agua contaminada para regar sus tierras.
“Además de la contaminación a los mantos acuíferos y al ambiente, hay mal olor de los desechos, y hasta el momento no hay antecedentes de gente presente enfermedades por consumir esta agua, pero no se descarta que se puedan dar”, dijo.
Juan C. Bonilla está ubicado a escasos siete kilómetros de San Pedro Cholula, sobre la carretera federal a México, donde hay también tres fraccionamientos (Capulín, Hogar y Diseño y Calabria) recientemente construidos, que forman parte del crecimiento de la mancha urbana, y que al carecer de un colector arrojan las aguas negras a la misma barranca.
Por lo expuesto, hizo un exhorto a las autoridades competentes, en especial a la secretaria de Sustentabilidad Ambiental y Ordenamiento Territorial, Amy Camacho, para que visiten la zona y hagan las recomendaciones pertinentes para acabar con el problema de contaminación en la zona.
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